Femicidio en Córdoba: aseguran que el nieto de 4 años de la víctima fue testigo y siguió al asesino
Paulina Silva ya había denunciado a su esposo por violencia de género. El dramático relato de la familia.
La causa que investiga el femicidio de Paulina Silva, la mujer asesinada de un disparo en la cabeza este miércoles por su esposo y padre de sus siete hijos, sigue sumando detalles escalofriantes. En las últimas horas, se supo que hubo un único testigo del crimen: el nieto de la víctima, un nene de cuatro años.
“El nietito chiquito presenció el caso, dicen los vecinos”, dijo Isabel Silva, prima de la víctima, en diálogo con El Doce. Ella misma, contó, vio a Raúl Cortez momentos después del crimen sin sospechar entonces lo que acababa de ocurrir.
“Vi que iba corriendo y cruzó la ruta. Pero qué me iba a pensar que iba a la comisaría”, precisó. El dato escalofriante es que el nene corría atrás del asesino, su abuelo.
Por su parte, el comisario mayor Martín Castro detalló que existían antecedentes por violencia de género en la pareja. “Sí, había denuncia por violencia, pero no puedo decir si había restricciones”, indicó.
El femicidio de Paulina Silva
Paulina Silva estaba desayunando en casa, ubicada sobre la calle Buenos Aires al 400 del barrio Mariano Fragueiro, cuando un disparo impactó en su cabeza y la mató en el acto.
Unos minutos más tarde, cerca de las 7 de la mañana, su esposo - Raúl Cortez - se presentó espontáneamente en una comisaría y confesó el femicidio.
Un grupo de efectivos se acercó poco después al domicilio del matrimonio y constató el hecho. En la escena, además del cuerpo de la víctima, encontraron un arma carabina calibre 22 largo con la que el femicida había asesinado a la madre de sus siete hijos.
Cortéz, un hombre de 56 años que se dedica a la parquización (la conversión de un terreno en zona verde, especialmente en parque o jardín), fue detenido entonces como el principal y único sospechoso del crimen.
Se trata del segundo femicidio en Córdoba en menos de 24 horas. Este martes otra mujer perdió la vida tras ser agredida por su expareja. El hecho ocurrió alrededor del mediodía, cuando un hombre violó una orden de restricción impuesta por la Justicia y mató a la mujer en barrio Villa Boedo, en la capital provincial.
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