La violencia en Rosario sigue en escalada constante y ya afecta a distintos ámbitos de la ciudad de Santa Fe, incluso el escolar. Este martes por la tarde, se vivió una situación más que tensa en un colegio mientras se desarrollaba un acto que se vio interrumpido por un tiroteo a metros de la institución.

El hecho se vivió en las inmediaciones de la Escuela N°1309 de Rosario, en la intersección de las calles Bolivia y La Paz, del barrio Godoy. Allí acuden alumnos en edad de jardín de infantes y primaria que tuvieron un evento especial en homenaje al general José de San Martín por un nuevo aniversario de su fallecimiento.

Mientras se desarrollaba el acto escolar, se oyeron a pocos metros 12 disparos que puso en alerta a los presentes. El tenso momento quedó registrado ya que gran parte de las familias estaban documentando la actuación de sus hijos. Muchos de los que estaba allí creyeron que se trataba de un tiroteo contra la escuela, por lo que hubo unos segundos de alboroto en el lugar.

Finalmente, las autoridades policiales de la zona acudieron al lugar y confirmaron que se efectuaron más de 12 disparos y se comenzó con un operativo dentro del colegio. Según lo detallado por los agentes, dos hombres en moto pasaron por la puerta del colegio y realizaron los disparos contra el domicilio de una mujer de 66 años para luego escapar a gran velocidad.

Diego Santamaría, jefe policial de Rosario, informó que no se produjeron heridos por el ataque y se secuestraron 12 vainas calibre 9 milímetros. Además, aportó que los delincuentes llevaban su casco y esto dificultó la posibilidad de que sean identificados por las cámaras de seguridad de la ciudad de Santa Fe.

Por su parte, una de las madres de los alumnos, relató con Telenoche Rosario (El Tres) lo que se vivió en la escuela: “Nos miramos, pensamos que era una moto o parte del sonido de la canción, pero después dijimos: no, son disparos”. Además, sumó: “El acto lo terminaron rápido y enviaron a los chicos al salón. Cuando llegó la Policía y empezó el operativo, nos retiramos con los chicos. Mi hija es de los grados menores y con su inocencia no entendía qué pasaba y me preguntaba por qué se habían ido todos”.

“Entre los padres nos preguntamos qué hacemos mañana, más allá de lo que decida la dirección. Nadie nos da garantía de que esto no pueda volver a pasar mañana o pasado. Es una tristeza que los chicos estén creciendo con esta realidad”, completó.