Los fiscales Patricio Saldutti y Franco Carbone sostienen que este El individuo, René Ungaro, ordenó desde prisión la comisión de homicidios al azar en la ciudad, con el objetivo de “infundir miedo”. Cada vida arrebatada tenía un precio: 30 mil pesos. Claudia Deldebbio (58), una profesora y bailarina, y su hija Virginia Ferreyra (32), profesora de gimnasia y danzas árabes, fueron víctimas de este plan el 23 de julio del año pasado. El ataque a balazos tuvo lugar en un complejo habitacional en el barrio Grandoli de Rosario. Deldebbio murió en el acto, mientras que su hija luchó por su vida durante dos meses antes de fallecer debido a las múltiples heridas de bala que sufrió. La acusación sostiene que Ungaro, desde su prisión en Ezeiza, se habría comunicado con un miembro de su banda, Nicolás Martínez, encarcelado en Coronda, y le habría encargado la tarea de reclutar a personas dispuestas a cometer asesinatos por dinero. El objetivo era sembrar terror, tanto entre bandas rivales como en la sociedad en general. Martínez contactó a Cortéz y su hijo, Lautaro, quienes se sumaron al plan junto con otros cómplices aún no identificados. Armados, llegaron a la escena del crimen en un automóvil y dispararon al azar contra las personas que se encontraban en una parada de colectivos y una plaza cercana. Además de Deldebbio y Ferreyra, un adolescente de 16 años resultó herido. La jueza María Chiabrera reconoció la acusación y dictó prisión preventiva para los cuatro detenidos en este caso. A todos se les imputa el delito de “homicidio doblemente calificado por precio o promesa remuneratoria y por el concurso premeditado de personas, agravado por el uso de arma de fuego en dos hechos en grado consumado”. Además, Ungaro y Martínez enfrentan cargos adicionales por intimidación pública. La investigación continúa, ya que no se descarta que otros asesinatos en Rosario hayan sido planificados y ejecutados por el mismo grupo bajo la misma modalidad. René Ungaro ya estaba cumpliendo condenas por otros delitos, incluido el homicidio de un barrabrava de Newell’s en 2010 y liderar una organización de tráfico de drogas.