POLICIALES
23 de noviembre de 2023
Desaparición y muerte del abogado Salvador Altamura: condenaron a prisión perpetua a su mejor amigo
El veredicto a Rubén Darío Dening se conoció esta tarde en los Tribunales de Quilmes. En sus últimas palabras, el acusado de 55 años aseguró que es “inocente”.
La Justicia condenó a prisión perpetua a Rubén Darío Dening (55) por la desaparición y posterior muerte del abogado Salvador Altamura, ocurrida en julio de 2020 en Quilmes. Era su mejor amigo y el único imputado. En sus últimas palabras, había reiterado que era “inocente”.
Por mayoría, Dening (55) recibió la pena máxima contemplada por el Código Penal ya que estaba acusado de haber cometido los delitos de “robo calificado por su comisión mediante el uso de llave verdadera, en concurso con el homicidio calificado por preparar, facilitar, consumar y procurar la impunidad”, en perjuicio de Altamura (48).La condena coincidió con lo que había solicitado en su alegato el fiscal del juicio Andrés Nieva Woodgate, y el tribunal informó que los fundamentos se darán a conocer el próximo lunes 27 a las 14. “Se hizo justicia. Ahora seguiremos buscándolo”, escribió Norma Wambold, madre de la víctima, en su estado de WhatsApp.
Dening pidió no estar presente en la sala durante la lectura del veredicto. Lo siguió desde la cárcel en la que se encuentra alojado desde hace 3 años. Cuando lo arrestaron estaba vestido con una campera de Altamura y con más de 300.000 pesos y 31.000 dólares, mientras intentaba escaparse en bicicleta a Entre Ríos.
En la última audiencia, brindó sus palabras finales y remarcó, nuevamente, que es “inocente de todos los cargos” que se le imputan. Tras esto, se retiró de la sala custodiado por agentes del Servicio Penitenciario Bonaerense mientras era insultado por familiares de la víctima, quienes le gritaban “asesino”, “amigo traidor” y “decí dónde tiraste a Salvador”
También durante la audiencia final tuvo lugar la réplica del fiscal de juicio Andrés Nieva Woodgate a los alegatos esgrimidos por la defensa de Dening, compuesta por los abogados Matías Aquino y Nicolás Agustín Payarola Hernayes.
En esa presentación, Nieva Woodgate consideró “fehacientemente acreditado” que el imputado mató a Altamura, a la vez que el representante del Ministerio Público agregó que el crimen ocurrió luego de que la víctima fuera emboscada por dos o más personas después de que los asesinos cortaran la luz de la cuadra en la que desapareció.
Previamente, tanto el fiscal de juicio como los abogados querellantes Braian Vidal y Ana María Pecone habían solicitado al TOC 3 que sea condenado a prisión perpetua, donde las partes acusadoras coincidieron en que el acusado lo mató con el objetivo de robarle dinero y que lo hizo “de manera tan efectiva que logró la desaparición de su cuerpo”.
Por su parte, los defensores señalaron que “los hechos no están probados” y que se “construyó” una imputación falsa, por lo que pidieron su absolución y su inmediata excarcelación.
El juicio comenzó el pasado 17 de octubre. En la primera audiencia, el padre de la víctima reconoció ante el tribunal a Dening como la persona que quedó registrada por las cámaras de seguridad con la moto de Altamura, que luego fue descartada en los alrededores de la Villa Itatí de Bernal.
Esa filmación fue exhibida ante varios de los testigos del juicio y al menos siete de ellos dijeron creer que era Dening quien estaba manejando. También durante el debate, el imputado aceptó declarar y trató de vincular el caso de Altamura con el comisario mayor Francisco Centurión, detenido por la desaparición de Lucas Escalante, quien es buscado desde el 9 de diciembre pasado.
Además, Dening señaló que Altamura tenía “deudas” y que en los últimos días su amigo “estaba con miedo y se quería ir”. Consultado sobre por qué se escapó cuando lo imputaron, sostuvo que tenía miedo y que, en realidad, la plata que le secuestraron cuando lo capturaron eran “ahorros propios”.
Salvador Altamura fue visto por última vez hace más de 3 años
La víctima fue vista por última vez el 13 de julio de 2020 por la tarde junto al acusado, en un galpón ubicado en la calle Rodríguez Peña 1210 de la localidad de Bernal, partido de Quilmes.
En el requerimiento de elevación a juicio, la fiscal Santoro sostuvo que Dening “a fin de preparar su posterior accionar ilícito y con el propósito de lograr su impunidad le dio muerte a Salvador Altamura”
Para la fiscalía, luego de asesinar a su amigo, tomó la moto de la víctima y se fue hacia su departamento, ubicado en la calle 25 de Mayo, en pleno centro de Quilmes, donde “se apoderó ilegítimamente de una suma de dinero no especificada y un arma de fuego calibre 9 milímetros” que eran del abogado.
Una de las pruebas que remarcó la fiscalía fue que luego de la desaparición del abogado, Dening adquirió un televisor, dos celulares y se halló un comprobante de pago para un estudio de abogados por la cifra de U$S5.000.
Además, fue clave el testimonio de familiares y amigos de la víctima, quienes coincidieron que por la contextura física, la persona que quedó filmada ingresando al departamento de la víctima la madrugada del 14 de julio de 2020 no era el abogado.
Norma Wambold, madre de la víctima, analizó el registró fílmico y explicó que a Dening “le gustaba usar ropa ajustada, pero se lo ve con un pantalón enorme y campera holgada, para simular el físico”, para hacer creer que se trataba de Altamura.
“Tuvo en cuenta muchos detalles, pero una cámara lo capta cuando va a descartar los guantes, el casco, el arma de Salvador y una máscara que se ajustaba a la cabeza, porque estábamos en pandemia”, señaló.
Un detalle que no dejó pasar por alto la fiscal Ximena Santoro fue que el conductor se equivocó el portón de ingreso y egreso del edificio, que de acuerdo a lo que indicó en el requerimiento, se trató de “una maniobra para nada usual por parte de los moradores habituales”.
Al momento de ser detenido, mientras intentaba ingresar en bicicleta a Entre Ríos, el imputado tenía en su poder la mencionada suma de dinero y además llevaba puesta una campera que era de Altamura.
La fiscal Santoro desdobló la causa, ya que sigue con la investigación para encontrar su cuerpo. Desde abril de 2022, el Ministerio de Seguridad bonaerense ofrece una recompensa de entre $2.500.000 y $5.000.000 para toda persona que aporte información para encontrarlo.