Una causa que comenzó a fines del año pasado por una denuncia de la Municipalidad de Moreno, que detectó el aumento de personas que circulaban con licencias de conducir apócrifas por las calles del partido, desembocó en el arresto de dos policías de la Bonaerense que pedían dinero a narcos para liberar la zona, indicaron fuentes del caso.

La principal imputada es integrante de la Delegación de Narcotráfico de la fuerza de seguridad de la provincia de Buenos Aires. La agente fue identificada luego de que los fiscales Jonatan Lay, de la ayudantía Fiscal General Rodríguez, y Emiliano Buscaglia, de la UFI N°5, citaran a declarar como imputados a los conductores que fueron demorados por tener en su poder licencias falsificadas. De acuerdo a las fuentes, son unos 35 infractores que habrían pagado desde 18 a 36 mil pesos por el documento. “La suba se explica por la inflación”, detallaron.

Los integrantes de la banda de falsificadores alertaban a los compradores que no circulen por la jurisdicción ni por CABA, debido a que las firmas de los supuestos responsables municipales no se correspondían con las reales. “Algunos no sabían que estaban frente a una organización criminal. Incluso, preguntaban si era algo ilegal antes de comprarles los registros. Les pedían una foto y sus datos personales para hacerlos”, indicaron.

Los conductores señalaron a dos personas, que fueron identificadas por la investigación. Una de ellas era la uniformada. “La llamaban y preguntaban por los registros. Ella, inmediatamente, pedía que continúen la conversación por WhatsApp”, precisaron las fuentes. La intervención telefónica a su celular no solo brindó las pruebas por ese delito, sino que también guió a los detectives hacia otro policía que presta funciones en el Comando de Patrullas de Moreno y es su familiar.

Sucede que en medio de la investigación, un hombre se presentó en la fiscalía y denunció a ambos por pedirle dinero a cambio de liberarle la zona para la comercialización de estupefacientes al narcomenudeo. “Aunque el denunciante negó vender droga, dijo que le pidieron 200 mil pesos, de los cuales pagó 10 mil”, señalaron las fuentes a este medio. “Quedaron en hablar, pero no lo hicieron”, agregaron.

Al mismo tiempo, apareció otra denuncia contra el sospechoso integrante del Comando de Patrullas. Según un detenido en un control policial, el agente le robó la tarjeta de débito y compró materiales para la construcción.

Ambos policías infieles fueron detenidos, junto a otras dos mujeres, durante ocho allanamientos simultáneos del Departamento de Delitos Fiscales de Policía Federal. En la investigación participó la Superintendencia de Asuntos Internos e Inspectoría General de la PFA y la División Asuntos Internos de la Provincia de Buenos Aires. Además, intervino el Juzgado de Garantías N°3 de Moreno General Rodríguez.

En el procedimiento, además, se secuestraron celulares, dispositivos electrónicos, documentación falsa y armas de fuego, entre ellas, las reglamentarias. La policía de la Delegación de Narcotráfico fue imputada por asociación ilícita en concurso con falsificación de documento público. En tanto, comparte la figura de concusión (NdeR: previsto en el artículo 268 del Código Penal y se define por usar en beneficio propio el dinero o bienes exigidos a otra persona con abuso del cargo) con el segundo agente, que también fue imputado por hurto calamitoso en concurso con defraudación, por el robo de la tarjeta.

Este martes, los cuatro detenidos serán indagados. En principio, las dos mujeres que fueron arrestadas serían parte de otra banda, indicaron fuentes judiciales. Estiman que en los celulares incautados encontrarán mayores evidencias. Los policías fueron alojados en una alcaldía de la PFA en la Ciudad de Buenos Aires.